Pic de la Coma de Varilles desde Coma de Ransol
부근 Ransol, Canillo (Andorra)
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트레일 사진



일정 설명
Cruzamos el puente de un caudaloso río dejamos a la izquierda la zona de picnic, torrente arriba unos jóvenes han perdido a su perro, no saben que hay ganado suelto y las mascotas tienen que estar controladas, no pueden andar sueltas, el animal se habrá despistado siguiendo algún rastro y con el ruido del agua de las cascadas, no le deja oír los silbidos de su dueño, mal rato para todos.
Los torrentes están muy caudalosos, las lluvias del día anterior fueron muy abundantes, los prados están desbordados, pisamos el agua que no pueden absorber, la mañana esta muy cerrada, unos bancos de espesa niebla entristecen el paisaje, moja la hierba que crece junto a los senderos, nuestras botas comienzan a sufrir tanta humedad, se están calando. Llegamos al refugio Coms de Jan, hay gente dentro, por la chimenea vemos humo, en una breve conversación nos cuentan, que para ellos acabó la montaña por hoy, almorzaran y descenderán al Ransol.
A nosotros, no nos faltan las ganas, nos ilusiona andar por estas montañas, la niebla no sera impedimento, nos gustan la dificultades, estaremos mas de cuatro horas bajo ese sirimiri que lo empapa todo. Ahora tomamos el sendero GRP, el trayecto es más horizontal, a la izquierda iniciamos un ascenso por el barranco del Riu Portelles, no seguimos ningún rastro, se vuelve mas empinado a medida que llegamos a la Portella de la Coma de Varilles, donde nos cruzamos con dos muchachos que vienen de la cima, nos dan ánimos y se los devolvemos, les harán mas falta que a nosotros, de eso estamos llenos.
Subimos unas laderas sin fondo, la niebla no nos lo deja ver, seguimos una tenue senda que tiende a desaparecer, arriba cresteamos unas rocas oscuras y tenebrosas, trayecto peligroso, las losas resbalan mucho, nos encontramos en las Piques de Pourtaneille.
Ya vemos la sombra de Varilles , emerge difusa ante nuestros ojos, en su cima una gran fita y nada más, no tardamos mucho en bajar por un sendero que calificó como la ruta clásica, mis botas parecen una piscina, su waterprof no ha aguantado ni tres horas bajo la lluvia, y todavía tenemos dos más de recorrido.
Después de coronar una cota de 2681 m y la cima Tossal de Caraup de 2644 m, tomamos el GRP por unos centenares de metros e iniciamos un descenso por las maderas mojadas de la montaña, un poco mas de agua a estas alturas no me importa.
Más abajo entramos en el bosque, señal que nos estamos acercando al final, bordeamos los rododendros que nos salen al paso por rastros que deja el ganado, hasta localizar el sendero que nos devuelve a la carretera donde está el automóvil.
Hemos andado juntos Héctor y Julián.
Los torrentes están muy caudalosos, las lluvias del día anterior fueron muy abundantes, los prados están desbordados, pisamos el agua que no pueden absorber, la mañana esta muy cerrada, unos bancos de espesa niebla entristecen el paisaje, moja la hierba que crece junto a los senderos, nuestras botas comienzan a sufrir tanta humedad, se están calando. Llegamos al refugio Coms de Jan, hay gente dentro, por la chimenea vemos humo, en una breve conversación nos cuentan, que para ellos acabó la montaña por hoy, almorzaran y descenderán al Ransol.
A nosotros, no nos faltan las ganas, nos ilusiona andar por estas montañas, la niebla no sera impedimento, nos gustan la dificultades, estaremos mas de cuatro horas bajo ese sirimiri que lo empapa todo. Ahora tomamos el sendero GRP, el trayecto es más horizontal, a la izquierda iniciamos un ascenso por el barranco del Riu Portelles, no seguimos ningún rastro, se vuelve mas empinado a medida que llegamos a la Portella de la Coma de Varilles, donde nos cruzamos con dos muchachos que vienen de la cima, nos dan ánimos y se los devolvemos, les harán mas falta que a nosotros, de eso estamos llenos.
Subimos unas laderas sin fondo, la niebla no nos lo deja ver, seguimos una tenue senda que tiende a desaparecer, arriba cresteamos unas rocas oscuras y tenebrosas, trayecto peligroso, las losas resbalan mucho, nos encontramos en las Piques de Pourtaneille.
Ya vemos la sombra de Varilles , emerge difusa ante nuestros ojos, en su cima una gran fita y nada más, no tardamos mucho en bajar por un sendero que calificó como la ruta clásica, mis botas parecen una piscina, su waterprof no ha aguantado ni tres horas bajo la lluvia, y todavía tenemos dos más de recorrido.
Después de coronar una cota de 2681 m y la cima Tossal de Caraup de 2644 m, tomamos el GRP por unos centenares de metros e iniciamos un descenso por las maderas mojadas de la montaña, un poco mas de agua a estas alturas no me importa.
Más abajo entramos en el bosque, señal que nos estamos acercando al final, bordeamos los rododendros que nos salen al paso por rastros que deja el ganado, hasta localizar el sendero que nos devuelve a la carretera donde está el automóvil.
Hemos andado juntos Héctor y Julián.
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